Hasta en dos ocasiones tuvimos que posponer la preboda de Carola y Ramses debido al mal tiempo, pero a la tercera fue la vencida. Con las mismas ganas del primer momento nos fuimos de ruta hasta las Salinas de Tenefé, donde realizamos parte de esta sesión.
Que bonita es esta profesión y que maravilloso es encontrar a gente tan generosa en este camino que llamamos vida. Gracias pareja por ser como son, por vuestro compromiso y por las risas que nunca olvidaré.
« Cuando los momentos se convierten en recuerdos»